Nuevas voces prueba el agua
"Ploop ploop ploop" es el singular sonido que se produce al verter una botella llena de lodo y agua del lago. Durante la reciente limpieza del lago Merritt de Oakland, llevada a cabo por estudiantes de New Voices Are Rising y personal de la Fundación Rose, sacamos del agua salobre del lago varias botellas y trozos de basura. Con redes de limpiafondos, recogimos una vela en un recipiente de cristal, casi atrapamos un billete de un dólar y retiramos una gran cantidad de plástico no identificable. "La escorrentía lleva la basura al lago y luego las mareas la llevan a la bahía", explica Katie Noonan, de la Instituto del Lago Merritt. Nuestros alumnos de New Voices trabajan con Katie en un proyecto para medir la calidad del agua en los desagües pluviales que desembocan en el lago.
Si tienes cuidado de no atropellar a los corredores en el sendero del lago Merritt,
Las redes para piscinas son la herramienta perfecta para sacar la basura del agua.
Medir el agua del lago Merritt es un primer paso para comprender cómo algún día Oakland podría recuperar el lago para uso recreativo y en beneficio de la fauna local. El lago Merritt, antaño un humedal de agua salada, se convirtió en lago sólo después de que los urbanizadores modificaran drásticamente el paisaje. La basura y los desechos humanos y animales siguen degradando la calidad del agua del lago y de su desembocadura en la bahía. Muchos desagües pluviales desembocan directamente en el lago, y las fugas ocasionales de las tuberías de alcantarillado, la basura frecuente y el uso del lago como baño también dañan la calidad del agua del lago.
Juzgar el agua no significa agitar la suciedad de un lago en una copa de vino y, afortunadamente, no requiere anotar su perfil de sabor. Sin embargo, a menudo es necesario perfilar su olor, además de una serie de medidas científicas. Katie y los estudiantes de New Voices tomaron muestras de agua de la parte superior e inferior del lago. También midieron la turbidez, o claridad, así como el oxígeno disuelto y la salinidad. Al ser un lago de agua salada, decenas de organismos morirán si bajan los niveles de oxígeno o salinidad. El Instituto del Lago Merrit entregará nuestras futuras muestras de análisis a la Agencia de Protección del Medio Ambiente, donde sus laboratorios podrán analizar la presencia de microorganismos presentes en los intestinos humanos y animales para determinar la cantidad de aguas residuales que entran en el lago.